Por qué, como venezolana, elijo no participar en las ceremonias del cacao

Nací en Venezuela, una tierra donde el cacao forma parte de nuestra vida cotidiana, nuestra historia y nuestra identidad. En Venezuela, el cacao siempre ha sido motivo de orgullo y un camino hacia la libertad.

En el siglo XVII, muchos africanos esclavizados escaparon a Chuao, un valle remoto donde el cacao y la libertad crecían a la par. El cacao criollo de esta región se considera ahora uno de los mejores del mundo, apreciado por su complejo sabor y textura suave.

Hoy en día, las ceremonias del cacao se han popularizado en todo el mundo, a menudo descritas como antiguos rituales místicos y de corazón abierto. Si bien aprecio la intención —relajarse, conectar, ser consciente—, para mí, como venezolano, el cacao no es un ingrediente exótico ni una novedad espiritual. Es un regalo de nuestra tierra que no necesita ritualización para ser respetado.

Bebo cáscara de cacao a diario, y sus beneficios son innegables. Pero últimamente, he estado observando cómo el mundo comercializa el cacao: envuelto en cristales, acompañado de cánticos de tierras lejanas, mezclado con deidades que nada tienen que ver con nuestra tierra. Es sorprendente ver cómo la palabra "ceremonial" puede inflar su precio, cuando en Venezuela, la cáscara de cacao a menudo se regala como parte del proceso de elaboración de la pasta de cacao.

Tengo muchos amigos y seres queridos que veneran profundamente el cacao y los respeto profundamente. Al fin y al cabo, la intención es conectar con nuestra espiritualidad. Me recuerda a mi abuela, que me pedía que fuera a la iglesia todos los domingos; iba por respeto a su cultura. Verla tan alegre al recibir la hostia, sabiendo que había buenas intenciones tras nuestras visitas, fue suficiente para que compartiera su ritual.

De la misma manera, honro el cacao a mi manera sencilla y cotidiana, agradecido por sus dones y las historias que transmite. Para mí, esa es la forma más auténtica de respeto, y la razón por la que no participo en ceremonias occidentales del cacao.

Rosa | CocoBee

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